(EE.UU.).- Por primera vez en su trayectoria deportiva, el japonés Shohei Ohtani disputó este sábado un encuentro de postemporada en la victoria de los Dodgers sobre los Padres por 7-5, y no decepcionó, porque desde muy temprano mostró su versión más decisiva.
Un cuadrangular suyo inauguró el marcador de los Dodgers e igualó la desventaja ante San Diego. No fue un jonrón más, sino el primero de Ohtani en una postemporada, y fue de tres carreras, lo ejecutó en la segunda para neutralizar un primer cuadrangular que ya había convertido Manny Machado.
Un doble de Xander Bogaerts volvió a adelantar a los visitantes en la tercera, y en la cuarta el dominicano Teoscar Hernández lanzó a los Dodgers con un sencillo.
Entre la sexta y la octava entrada, ya con la ventaja por 7-5 de los angelinos, ninguno de los dos equipos logró sumar. Esta sequía tuvo continuidad en el último turno al bate de los Padres, que no lograron contestar los lanzamientos de Blake Treinen y liberaron a la grada del Dodger Stadium para festejar el primer triunfo y la ventaja en la serie divisional.
GUARDIANES 7-0 TIGRES
Las semana de inactividad no fue un problema para Cleveland, que arrancó esta serie blanqueando a Detroit y dando una exhibición al bate desde muy temprano. Ya en la primera entrada el marcador reflejaba un contundente 5-0 del que no pudieron levantarse jamás los Tigres.
El dominicano José Ramírez encendió la mecha con un batazo que significó el primer punto del encuentro y puso a corear su nombre desde la grada.
Lane Thomas cerró ese primer turno al bate de los Guardianes convirtiendo su primer jonrón, que sumó tres carreras para los suyos. No fue hasta la sexta entrada cuando los locales conseguirían las dos anotaciones restantes con un doble de David Fry, impulsando a Johnkensy Noel.
Desde el montículo, Tanner Bibee no pudo tener mejor debut en la postemporada, permitiendo únicamente cuatro hits, sin anotación y ponchando a seis rivales. Fueron cuatro entradas con él lanzando, pero en la rotación incluso se castigó más a unos Tigres que no pudieron ni golpear la bola durante el paso de Cade Smith, Tim Herrin, Hunter Gaddis y el dominicano Emmanuel Clase.
Los Tigres distaron mucho de la buena imagen que dieron en la ronda de comodín en la que lograron eliminar a Houston en dos partidos.
FILIS 2-6 METROS
La ventaja de campo pasa a favor de los Metros después de su triunfo en la apertura de la serie en el Citizens Ball Park de Filadelfia.
Aunque los neoyorquinos esperaron mucho para convertir carreras, fue en la octava entrada cuando consiguieron cinco de una tacada que resultarían a la postre definitivas. Se habían adelantado los Filis en la primera con un jonrón de Kyle Schwarber.
Tras esto, fueron seis entradas sin conversiones de ninguno de los dos equipos. La reacción para los Metros la activó el jugador de origen nicaraguense y dominicano Mark Vientos con un sencillo.
De hecho, los visitantes no necesitaron de ningún jonrón para hacer crecer su marcador. Brandon Nimmo, Pete Alonso y J.D. Martínez anotaron a ritmo de sencillos.
La quinta carrera la despachó el dominicano Starling Marte con un elevado de sacrificio para que la sumara el cubano José Iglesias.
La derrota para los Filis encuentra varios responsables, pero también un héroe que sostuvo las opciones del equipo- el lanzador Zack Wheeler fue fundamental frente a su antiguo equipo, limitándoles a tan solo un golpeo en siete entradas.
YANQUIS 6-5 REALES
En Nueva York se presenció un choque de máxima igualdad con hasta cinco cambios de dominio en el luminoso y que terminó por quedarse en casa, gracias a un sencillo en la séptima entrada del jugador de origen mexicano, Alex Verdugo, haciendo honor a su apellido para liquidar a los Reales.
Se adelantó Kansas City con un sacrificio de Tommy Pham que rápidamente quedó anulado con el jonrón del venezolano Gleyber Torres en la tercera y que puso a correr al propio Verdugo.
A la batalla de cuadrangulares le dio continuidad M.J. Meléndez en la cuarta, este fue de dos carreras, para volver a poner por delante a los visitantes. Habría tres cambios de mando más en el luminoso, hasta el definitivo, el de Verdugo, para tranquilizar a los casi 50.000 espectadores que se dieron cita en el Yankee Stadium.
EFE
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