SANTO DOMINGO.-El proyecto de ley reforma fiscal presentado por el Poder Ejecutivo este lunes, no ha sido acogido en la misma medida por los diferentes sectores a los que van dirigidas las medidas contenidas en dicha pieza.
Mientras las MIPYMES, uno de los sectores más privilegiados con la inminente reforma, la apoya, las grandes empresas y la industria, a los que se le retirarán las exenciones y se le aumentarán los impuestos, la definen como un duro golpe al bolsillo de los dominicanos.
La propuesta de modernización fiscal presentada por el gobierno desató el avispero entre los sectores que verán afectados con la mayor carga impositiva, como las grandes empresas y las industrias.
La reacción de la vicepresidenta de la Asociación Dominicana de Productores de Ron no se hizo esperar. Cirse Almánzar advirtió que el gravamen a las bebidas alcohólicas impulsará el comercio ilícito y la adulteración de las mismas, fomentando la informalidad.
Mientras que los industriales de Herrera, mantienen la incertidumbre de si algunas empresas pondrán aguantar el inminente aumento salarial que aseguran se tendrá que realizar, tal como lo han planteado algunos sectores para evitar una merma en el poder adquisitivo de la población.
Advierten además que la eliminación de algunas exenciones fiscales, afectará la competitividad a nivel internacional.
No obstante, la Asociación de Micro, Pequeños y Medianos Empresarios, ven con mayor optimismo la propuesta de reforma, ya que fue acogido su viejo reclamo de la eliminación del pago de anticipo del Impuesto Sobre la Renta, tributo que ha llevado a la quiebra a cientos de emprendedores.
Con estas y otras medidas contenidas en este proyecto de reforma, el gobierno busca no solo aumentar la recaudación fiscal, sino grabar el consumo de productos que no forman parte de la canasta básica familiar y consumos esenciales.
El Pacto Fiscal es el único pendiente, de los tres establecidos en la Ley de Estrategia Nacional de Desarrollo.
Rosalba Escalante
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